Los clubes brasileños se esfuerzan para encontrar estadios donde jugar sus partidos por la Liga Brasieña debido a que la FIFA ha tomado control de muchos de los estadios y centros de entrenamiento para la Copa Mundial.
A partir de esta semana, los clubes no están autorizados para jugar en los doce estadios que se emplearán durante el Mundial, ni tampoco en las sedes que se emplearán para entrenamiento.
Unos 30 partidos ligueros tuvieron que ser alterados para las cuatro últimas jornadas antes de la pausa para el Mundial. De los 20 clubes de primera división, catorce tienen que ceder su ventaja como local.
El único estadio mundialista que presentará un partido de la liga brasileña antes del magno torneo será el Itaquerao, solo porque la FIFA solicitó otra prueba en la atribulada sede de Sao Paulo que presentará el partido inaugural entre Brasil y Croacia el 12 de junio.
La liga brasileña se interrumpirá el 1 de junio. Solo nueve de las 38 ruedas se habrán jugado antes de la pausa mundialista.
«Esta interrupción es un problema para nosotros», dijo el técnico de Sao Paulo, Muricy Ramalho. «Tenemos que practicar, no podemos parar. Este es un año difícil para todos los clubes. El año solo comenzará después de la Copa Mundial».
La FIFA y el comité organizador local del torneo mundial empezaron a tomar control de los estadios y centros de entrenamiento esta semana para asegurarse de que pudieran hacerse los arreglos finales antes del certamen. Además de los doce estadios mundialistas, la FIFA y los organizadores locales tomaron control de 24 sedes consideradas campos de entrenamiento oficiales en las ciudades sede.
Entre los estadios que no presentarán partidos mundialistas pero que están en control de la FIFA están el Pacaembú, Vila Belmiro, Independencia y Arena Gremio.
El campeón vigente Cruzeiro, Atlético Mineiro, Internacional y Santos son algunos de los clubes afectados. Otros incluyen Corinthians, que utiliza un estadio más pequeño en Sao Paulo, y Palmeiras, que trasladó sus partidos a ciudades en el interior del estado. Flamengo presenta algunos de sus partidos en una ciudad a 180 kilómetros (110 millas) de Río, mientras que Bahía sale de su estado para jugar en Sao Paulo.
Sin lugar donde practicar, algunos clubes viajarán fuera de Brasil durante el mundial. Atlético Mineiro viajará a China mientras la selección de Argentina use su centro de entrenamiento en Belo Horizonte. Estados Unidos será el destino del campeón brasileño Cruzeiro, que cedió su base a la selección de Chile. Sao Paulo, cuyo campo de entrenamiento será utilizado por los estadounidenses, también viajará presumiblemente a Estados Unidos.
Además de estadios y campos de entrenamiento, los clubes también han cedido algunos jugadores para la selección.
Aunque los preparativos brasileños no comenzarán hasta la semana próxima, los clubes no pueden usar ninguno de los jugadores que han sido escogidos para ninguno de los 32 equipos nacionales que vienen para disputar la copa del mundo. Ni siquiera los siete alternativos.
Fluminense apeló a la FIFA para que le permita usar a su arquero Diego Cavalieri, pero su pedido fue rechazado. El golero se perdió el partido liguero contra Sao Paulo el miércoles.
«Ni siquiera se entrena con la selección nacional; no tiene sentido», se lamentó el director de Fluminense, Mario Bittencourt. (agencias)