El presidente de la Real Sociedad, Jokin Aperribay, admitió que las negociaciones con el Barcelona para el traspaso de Claudio Bravo están «avanzadas», mientras que las posturas del club de San Sebastián y el Arsenal para retener a Carlos Vela «no están cerca».
Aperribay se ha referido a las dos negociaciones paralelas que mantiene abiertas el club en estos momentos al término de una comida que ha celebrado con la directiva del Eibar, el club guipuzcoano ascendido a primera al que la entidad donostiarra ha felicitado hoy por su logro.
Respecto al futuro de Claudio Bravo, el presidente realista ha explicado que el jugador ha decidido aceptar la oferta del Barcelona y la Real se ha reunido con los gestores del club catalán en varias ocasiones, hasta el punto que quedan «algunos flecos» para cerrar el acuerdo.
Aunque no ha querido desvelar cifras, Aperribay ha reconocido que el planteamiento del Barcelona es abonar una cantidad de dinero y ceder a un jugador de su plantilla a la Real Sociedad, que podría ser el centrocampista mexicano Johnatan Dos Santos, pretendido el pasado año por el club donostiarra.
La otra negociación en marcha se mantiene abierta con el Arsenal, club que tiene el 50% de los derechos del delantero mexicano Carlos Vela y que ya ha comunicado a la Real que cuenta con él para la próxima temporada, tal y como ha confirmado el presidente donostiarra.
La Real pretende llegar a un acuerdo con el club londinense para quedarse con todos los derechos sobre el jugador, aunque, según Aperribay, aún no se han puesto cifras concretas sobre la mesa.
No obstante, en este caso, a diferencia del de Bravo o el de Antoine Griezmann, el mexicano ha expresado su deseo de continuar en la Real Sociedad. «Contamos con la suerte de que el jugador está con ganas de quedarse en San Sebastián con nosotros y eso es un punto importante para la Real Sociedad», ha argumentado el presidente.
Respecto a Griezmann ha asegurado que el club aún no ha recibido ninguna oferta y no ha querido ser «prisionero» de sus palabras, por lo que no se ha comprometido a exigir la cláusula de rescisión del jugador -30 millones de euros-, sino que se ha limitado a asegurar que hará lo mejor para los intereses de la Real.
«Aquí van a jugar los que quieran vestir la camiseta de la Real», ha zanjado. Pese a todas las incógnitas que sobrevuelan a su plantilla, Jokin Aperribay se ha mostrado optimista y ha dicho que «el equipo puede salir reforzado» para la próxima temporada.