*Con admiración, menciona a su padre, su principal inspiración, quien, a pesar de tener que dejar el boxeo por un accidente, sigue siendo su guía. “Mi papá siempre me ha apoyado. Él es el que me enseña, me da algunas combinaciones y gracias a él estoy aquí”, afirma.
Por Sergio Masté
![](https://www.diagonalsport.com.mx/wp-content/uploads/2024/10/Sin-titulo.jpg)
Desde muy joven, Josué David Cob Uch ha vivido en medio del boxeo, aunque quizás no fue hasta hace poco que descubrió que este deporte va más allá de sus propios puños. En su sangre corre la herencia de campeones, con lazos familiares hacia leyendas como Melchor “Baby” Cob y Román Cob. Su padre, José Natanael Cob Durán, también es boxeador, y le inculcó el amor por el cuadrilátero desde la infancia. Josué David, de solo 14 años, ha enfrentado retos no solo en el ring sino también en la vida misma, y el boxeo le ha dado la fuerza y la disciplina para seguir adelante.
A pesar de una malformación congénita, él demuestra que su espíritu va mucho más allá de cualquier defecto físico. «Tengo un pequeño problemita sobre mi oreja, así nací, pero tengo tímpano, y siempre me daba tristeza… Me ganaba el llanto, por así decirlo, pero ahora no me da tristeza ni remordimiento. Estoy fuerte», expresa Josué con una madurez que inspira. Este joven, que cursa la secundaria, ha transformado la tristeza en determinación, encontrando en el boxeo su refugio y su segunda casa. Entrena en el gimnasio ubicado en la región 259.
VALENTÍA Y RESISTENCIA
Actualmente, entrena en la academia ubicada en la región 259, con el profe Alan (Warriors 259), un entrenador experimentado, le ayuda a perfeccionar su técnica. Entre guanteos, prácticas y conversaciones, Josué va fortaleciéndose, no solo en condición física, sino también en valentía y resistencia. «Me ganan los nervios, claro que sí», admite al hablar sobre la emoción antes de cada combate, «pero ya estando arriba, lo que es el miedo, lo que son los nervios, todo como que ahí se me despeja la mente.»
![](https://www.diagonalsport.com.mx/wp-content/uploads/2024/10/photo_4972207369006197739_y.jpg)
La adversidad no es nueva para él. Desde el kínder, Josué ha enfrentado el bullying debido a su condición, pero ha aprendido a sobrellevarlo: “En la primaria no hubo problema. Aquí en la secundaria hubo algunos casos, pero me he mantenido ahí. Porque tengo la esperanza. Estoy completo, no me falta ningún pie, no me falta ninguna mano.» Apoyado por sus padres, ha aprendido a ver su diferencia física con normalidad y a ignorar las burlas, demostrando que no hay límites cuando se tiene determinación.
DISCIPLINA, RESPETO Y AUTOCONTROL
Para Josué, el boxeo es más que lanzar golpes; es disciplina, respeto y autocontrol. Con admiración, menciona a su padre, su principal inspiración, quien, a pesar de tener que dejar el boxeo por un accidente, sigue siendo su guía. “Mi papá siempre me ha apoyado. Él es el que me enseña, me da algunas combinaciones y gracias a él estoy aquí”, afirma.
![](https://www.diagonalsport.com.mx/wp-content/uploads/2024/10/photo_4972207369006197740_y.jpg)
Con la vista en el futuro y grandes sueños, Josué admira a figuras del boxeo profesional como Gervonta Davis, “Canelo” Álvarez y Jaime Munguía, quienes lo motivan a entrenar con fuerza y a superar sus propias barreras. Sin embargo, no utiliza sus habilidades para la violencia. «Para defenderme son las palabras, porque llegando a golpes no se soluciona nada, y el boxeo es sobre todo una disciplina», dice con convicción.
![](https://www.diagonalsport.com.mx/wp-content/uploads/2024/10/photo_4972207369006197741_y.jpg)
Aún joven, Josué David Cob Uch sigue construyendo su historia en el ring. Entre entrenamientos y sacrificios, ha encontrado en el boxeo una pasión y una vía para demostrar que, con valor y disciplina, cualquier adversidad puede ser enfrentada.